ANDRÉS VILLAMIZAR Y SU CIRCO DE LA UNIDAD NACIONAL DE PROTECCIÓN

Andrés Villamizar y su circo de la Unidad Nacional de Protección

Todos en la UNP saben que Villamizar controla todo lo que sucede en la entidad, y que es él quien quita y pone esquemas de seguridad a su antojo. Hasta a su mamá le dio escoltas y carros blindados

Por Ricardo Puentes Melo

Agosto 31 de 2014

El circo gubernamental de este gobierno tuvo otro capítulo más por cuenta de Andrés Villamizar Pachón, director de la Unidad Nacional de Protección quien, fingiendo que “desde adentro” se había descubierto una supuesta red de corrupción, se despachó contra el Secretario General de la UNP, Julián Marulanda Calero,  asegurando que él era la cabeza de una banda cuyos miembros  “exigían pagos de un soborno.. (…) exigían a las empresas sobornos para pagarles las facturas”.

También aseguró Villamizar en “Blu Radio” que la supuesta banda sobrefacturaba varios servicios cuyo excedente era repartido entre Marulanda, otros funcionarios y la empresa prestadora del servicio. Villamizar calcula que se han robado miles de millones de pesos.

Como en Periodismo Sin Fronteras habíamos denunciado ya que Villamizar usaba la Unidad Nacional de Protección para pagar los favores políticos de Juan Manuel Santos, y habíamos mencionado que Julián Marulanda no dudaba en expresar su antiuribismo en las redes sociales, quisimos averiguar qué había detrás de todo esto.

Hablamos con funcionarios de la UNP que pidieron mantener su nombre en reserva, debido al temor que tienen hacia Andrés Villamizar. Nos contaron muchas cosas.

La primera, es que Julián Marulanda jamás gozó de los afectos de Andrés Villamizar. Desde la llegada a la UNP, Villamizar vio con

recelo a Marulanda a quien siempre consideró un posible contendor que le arrebataría el apetecido cargo de Director de esa entidad.

Por la época en que Marulanda llegó a la UNP, estaba allí laborando Germán Escobar Borráez, ficha muy cercana a Villamizar. Escobar manejó, junto a su jefe y amigo Villamizar,  todo el proceso de contratación al inicio de funciones de la UNP, y dicen allá que ríos de dineros se vieron correr en esas contrataciones. Todo, obviamente, manejado por Villamizar y Escobar. Este último detentaba todo el poder en la entidad con la bendición de Villamizar.

Ya Villamizar y Germán Escobar habían llevado a trabajar a Alonso Miranda.

En la primera semana de julio de 2012, Germán Escobar aparece muerto de un disparo en su apartamento en Bogotá. Andrés Villamizar emite un escueto comunicado de prensa donde dice que se trató de una muerte accidental. Pero la verdad parece ser otra.

En el proceso de contratación manejado por Villamizar y Escobar, se habían ordenado hacer varias pruebas para probar la calidad de los blindados que ofrecían VISE, la empresa oferente a la que Villamizar y Escobar estaban haciendo fuerza para otorgarles el multimillonario contrato, y PROSEGUR.

La prueba consistió en disparar contra los chalecos blindados y contra la probeta de vidrios blindados. La probeta de VISE estalló en mil pedazos y, aunque la de PROSEGUR salió bien, esta empresa no fue contratada.

Dicen nuestras fuentes que hay documentos de puño y letra de Germán Escobar ordenando falsear los resultados a favor de VISE.

Y es ahí cuando Germán Escobar aparece muerto de un tiro en la sien. Un suicidio que Andrés Villamizar intenta tapar aduciendo que Escobar, “por accidente” se pegó un disparo en la cabeza. Nadie le cree eso. La verdad, nos aseguran funcionarios de la UNP, es que Escobar se suicidó desesperado porque, presuntamente, ya habría recibido algún dinero de la empresa que él quería beneficiar.

Laura Quintero, quien se encontraba con Germán Escobar, y quien fuera testigo de las razones de la muerte de él, fue apadrinada inmediatamente por Andrés Villamizar quien la ascendió, le subió el salario y la llenó de atenciones. Ni ella ni Villamizar han aclarado las razones del suicidio de Escobar.

Muerto Germán Escobar, Alonso Miranda Montenegro (subdirector de Protección) pasa a ser el consentido de Andrés Villamizar, y su ficha para atacar a Marulanda acusándolo de las cosas que saben ya todos.

Lo que no cuentan ni Villamizar ni Alonso Miranda es que –según nuestras fuentes- éste último fue el director de la obra de remodelación de las oficinas de la calle 26, donde hubo sobrecostos hasta del 300% en muchísimas cosas.

Por otro lado, un informe de la Contraloría refiere que hay fallas graves en el sistema de información SISPRO en la UNP. Alonso Miranda ha asegurado que ese sistema funciona a la perfección pero la realidad es que nunca ha funcionado. Se perdieron más de 700 millones de pesos en eso.

Según nuestros informantes, Alonso Miranda contrató a IPL para que monitoreara el sistema de información a un costo de 22 millones de pesos mensuales. 22 millones de pesos mensuales pagados a una empresa para que monitoree un sistema que NO EXISTE, 22 millones por un trabajo que no se hace.

Cuando Julián Marulanda descubre este peculado, detiene los pagos y Alonso Miranda entra en cólera. Y es entonces cuando aparece la grabación donde Marulanda habla con quien hasta entonces creía su amigo, Carlos Bermúdez Cuchimaque, y éste le indujo las respuestas tratando de que Marulanda mencionara la palabra “dinero”. Una grabación comprometedora, sin duda, que no obstante hay que escucharla por completo y no editada como lo hicieron en la W radio para entenderla en su contexto.

Es con esta grabación que Villamizar logra su viejo sueño de sacar del medio al incómodo Julián Marulanda contando con la ayuda de Rafael Merchán, secretario de Transparencia de la Presidencia.

El escándalo le cae como anillo al dedo a Andrés Villamizar, quien ha sido responsable de varias muertes de protegidos a quienes él ha ordenado el retiro de sus esquemas de seguridad. Los casos más recientes son los de Adán Quinto, a quien le disminuyó su esquema facilitándoles la labor a los asesinos, y el del periodista Luis Carlos Cervantes.

Precisamente, nuestras fuentes nos dicen que Andrés Villamizar se refería al periodista Cervantes en términos despectivos, y que ordenó el retiro del esquema aduciendo que “ese negrito lo único que hace es poner la música en la emisora..” y burlonamente –nos aseguran- Villamizar decía que Cervantes no corría riesgo alguno, que era invento “del negrito” para tener carro blindado.

Por quitarle el esquema causándole la muerte a Cervantes, Villamizar estaba desacreditado con el gobierno, y pensaban retirarlo para poner en su lugar al ex

ministro Juan Camilo Restrepo. Villamizar sabía de su planeada insubsistencia y presionó para que sus primos le ayudaran a postular el nombre de Alonso Miranda para reemplazarlo. Pero Santos quería poner allí a Juan Camilo Restrepo. Precisamente el día anterior al escándalo, Villamizar iba a ser removido de su cargo. Y tal vez por ello el salir a los medios a posar como el gran investigador que destapó la corrupción interna en la UNP lo mantendrá más tiempo en su cargo, para peligro de los protegidos que no son afines al gobierno. No por nada sus primos, los senadores Galán Pachón, lo protegen y le cuidan el cargo en la Unidad Nacional de Protección. Además de ellos, Villamizar es la cuota política de Germán Vargas Lleras, actual vicepresidente de la República.

Nadie se ha preguntado qué nexos hay entre Alonso Miranda y la empresa NetLogistik, contratada para hacer una auditoria sobre procesos. Esta firma recibe cerca de 400 millones de pesos por hacer una auditoria de nada. ¿Cómo es posible que NetLogistik no descubriera nada de estos desfalcos en esos dos años? ¿O es que sí sabían pero el culpable no es quien Villamizar asegura que es?

Siendo el todopoderoso de la UNP, Andrés Villamizar se siente protegido por sus primos y por el vicepresidente y no teme que nadie se pregunte cómo fue posible que la supuesta banda interna de esa entidad funcionara sin que él se diera cuenta. O fue por cómplice o por inepto, pero en cualquiera de los dos casos Villamizar debería presentar su renuncia y ser investigado por la Fiscalía.

Porque todos en la UNP saben que Villamizar controla todo lo que sucede en la entidad, y que es él quien quita y pone esquemas de seguridad a su antojo. No es cierto que el CERREM lo haga con independencia, sino que se obedece lo que Villamizar disponga. No por nada él, sin estudios de ninguna clase, sin amenaza alguna, le coloca esquema de seguridad a Ángela María Giraldo, “víctima” cercana al gobierno y adjudicataria de millonarios contratos.

También tiene esquema de seguridad ordenado por Villamizar, Maruja Pachón de Villamizar, madre suya y también contratista del gobierno. Y así son la mayoría de los casos.

Las preguntas quedan en el aire. Las respuestas las intuimos.

Lo que nos queda claro es lo que ya habíamos denunciado en Periodismo Sin Fronteras: Que Andrés Villamizar maneja la Unidad Nacional de Protección como si fuera una tienda, su tienda, y que sus primos senadores –Los Galán Pachón- alcahuetean ese negociado en se convirtió la UNP.

Nos queda claro también que Villamizar es quien pone y quita esquemas a su antojo, como si fuera la parca, y que beneficia a su familia y amigos con tales esquemas mientras que quienes lo necesitan son tratados con burla y desprecio por él.

Y nos queda claro que “ese negrito” que “lo único que hace es poner la música en la emisora..” fue asesinado porque a Villamizar se le dio la gana de quitarle su esquema de seguridad mientras reforzaba el de Maruja Pachón de Villamizar, su señora madre, y el de todos los de la camarilla del gobierno.

En próximos días deberemos esperar más sorpresas si aparece Julián Marulanda Calero. Pero nada de raro que, Dios no lo quiera, aparezca muerto por ahí. Son demasiados secretos los que él conoce.

@ricardopuentesm