¿LA AUTOMATIZACIÓN EXTERMINARÁ LA MANO DE OBRA HUMANA?
En medio de este contexto de automatización y reducción de la demanda de trabajo uno se pregunta ¿Por qué el Código laboral colombiano mantiene una jornada laboral de 48 horas semanales?
¿La automatización exterminará la mano de obra humana?
En medio de este contexto de automatización y reducción de la demanda de trabajo uno se pregunta ¿Por qué el Código laboral colombiano mantiene una jornada laboral de 48 horas semanales?
Por Daniel González*
Noviembre 2 de 2017
@dangonzalez0504
Desde que la computadora y los chips hicieron su aparición en el mundo de la tecnología, diversos analistas han alertado sobre los eventuales peligros que se ciernen sobre el mundo; entre ellos, la desaparición de millones de puestos de trabajo y el reemplazo paulatino pero inexorable de la mano de obra humana.
¿Es la automatización un peligro para la humanidad? ¿O es una oportunidad?
La automatización a gran escala, primero en las grandes empresas industriales (el sector automovilístico fue de los primeros en hacerlos) y ahora en el sector de los servicios (gasolineras sin bomberos, supermercados sin cajeros) es de los mayores problemas que tendrá el mundo en las siguientes décadas.
Empíricamente, dos investigadores en MIT midieron el efecto de esta automatización sobre el mercado laboral en EE.UU. y, luego de aislarlo de otras variables (crecimiento económico, tercerización laboral, relocalización a otros países), encontraron lo siguiente a grandes rasgos:
1. Reducción número de horas trabajadas.
2. Reducción salarios de los empleados.
En medio de este contexto de automatización y reducción de la demanda de trabajo uno se pregunta ¿Por qué el Código laboral colombiano mantiene una jornada laboral de 48 horas semanales?
ARTICULO 161. DURACIÓN La duración máxima de la jornada ordinaria de trabajo es de ocho (8) horas al día y cuarenta y ocho (48) a la semana. (Código Sustantivo del Trabajo)
Esa jornada laboral es excesiva y es un legado que viene desde los años 30, su lógica era: Se trabaja de lunes a sábado durante 8 horas diarias, y se descansa el domingo.
Pero esa jornada laboral larguísima es incompatible con el mundo de hoy, en donde la automatización extendida reduce la demanda laboral de manera sostenida cada año, incrementando la competencia por los trabajos que quedan y consecuentemente reduciendo los salarios de quienes tienen la suerte de contar con un trabajo.
Una manera de contrarrestar esta destrucción de demanda laboral, que se ha experimentado satisfactoriamente, es la reducción de la jornada laboral. Hay un caso concreto, similar al de Colombia.
A mediados de los 90s el gobierno portugués redujo su jornada laboral a 40 horas semanales, un experimento natural aplicable a una economía similar a la de Colombia donde la jornada laboral era mayor a la norma internacional (aunque de menor tamaño que en Colombia).
Anterior al cambio, la jornada laboral portuguesa era de 44 horas semanales y se vio reducida a 40; el resultado general se puede calificar de positivo y, como se podría esperar en cualquier política de reducción de la oferta laboral, los salarios por hora se incrementaron y no hubo destrucción laboral a largo plazo ni efectos negativos sobre el crecimiento del país que se mantuvo cercano al 1% durante los años siguientes.
Para estudiar en detalle los efectos de esta política se puede revisar ‘How Working Time Reduction Affects Employment and Wages’ de Pedro Raposo (2008).
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