LA MARIKOSTROIKA SANTISTA LLEGÓ A MOSCÚ
Cada viernes, el embajador entra por el garaje a los muchachitos gays que seduce en las discotecas o que su masajista o el ministro Consejero Rubén Darío Flórez consiguen para amenizar los bacanales. Luego, los hacen salir hasta el lunes en la mañana, antes de iniciar labores
La Plaza Rosa de Moscú
Cada viernes, el embajador entra por el garaje a los muchachitos gays que seduce en las discotecas o que su masajista o el ministro Consejero Rubén Darío Flórez consiguen para amenizar los bacanales. Luego, los hacen salir hasta el lunes en la mañana, antes de iniciar labores
Por Ricardo Puentes Melo
Agosto 28 de 2013
Si no ando mal de información, Rafael Francisco Amador Campos nació políticamente al lado de Luis Carlos Galán, y además es serpista y pastranista. Creo recordar que fue sancionado por la Procuraduría General de la Nación por ‘tráfico de influencias’, cosa que al camarada Santos y a la canciller María Ángela Holguín les pareció asunto de poca monta al nombrarlo como embajador ante el Gobierno de la Federación de Rusia (ver DECRETO 2607 DEL 14 DE DICIEMBRE DE 2012 ) por recomendación de César Gaviria Trujillo, según nos informan.
Pues resulta que Portafolio ha publicado dos artículos donde cuentan que nuestro flamante embajador en Rusia tiene molestos a los rusos, no solo por su ineptitud y las quejas de varios miembros del gobierno, sino por los escándalos sexuales que ya son famosos en el piso 4 de la embajada de Colombia en donde el Dr. Rafael Amador y sus amiguitos hacen desvergonzadas orgías homosexuales.
Según Portafolio, la canciller Holguín le abrió investigación al embajador Amador. Nosotros lo dudamos. Siendo cuota de César Gaviria y de Horacio Serpa, hay que desconfiar de que el Sr. Amador sea sancionado. Es más, si lo sacan de Rusia seguro lo enviarán a otra embajada para que siga con sus prácticas descarriadas de la normalidad.
Y no solo él está en entredicho; junto a la cónsul Mery Lozano son acusados por Portafolio como ineptos y de tratar despóticamente a los estudiantes colombianos que estudian en Rusia y que no comparten las fantasías homosexuales del embajador (Ver: http://www.portafolio.co/opinion/blogs/negocios-y-movidas/el-embajador-rusia-tiene-los-dias-contados)
Investigando, varios estudiantes han contado que luego de la denuncia de Portafolio, el embajador y su cónsul han tomado venganza en contra de algunos jóvenes a quienes acusan de “sapos” amenazándolos con imputarlos de cualquier cosa con tal de que sean deportados a Colombia.
El asunto no es nuevo. Los hechos vienen desde la salida del embajador Diego Tobón y la llegada de Rafael Amador a la embajada. Desde ese momento, su masajista y amiguito de cosas, el masajista y dizque “auxiliar de la Misión Diplomática”, Jaime Olaya Amado (Amador y Amado, vaya, vaya) se ha encargado de amenazar a quien ose denunciar. Parece que tiene apariencia de matón, porque muchos estudiantes agredidos sienten profundo pavor ante él.
En Moscú dicen que, cada viernes, el embajador entra por el garaje a los muchachitos gays que seduce en las discotecas o que su masajista o el
ministro Consejero Rubén Darío Flórez consiguen para amenizar los bacanales. Luego, los hacen salir hasta el lunes en la mañana, antes de iniciar labores. Las empleadas de aseo se mueren de asco de todas las suciedades que dejan en las fiestas gays del embajador, quien aprovecha que las cámaras de seguridad solo apuntan hacia la entrada del primer piso, en el ascensor, y no en el garaje. Y, aunque los agregados militares se han percatado de todo esto, ninguno quiere hablar porque saben que Amador es cercano a Santos, Gaviria y Serpa, y que cualquier denuncio puede afectar negativamente sus carreras o sus pensiones.
Aunque me niego a creer que el semiólogo y poeta Rubén Darío Flórez Arcila , profesor de la Nacional, sea partícipe de esto, mis fuentes me lo ratifican. Traté de hablar con el concejal Juan Carlos Flórez Arcila- quien nos dijo que Rubén Darío era su hermano- para ver si podía entrar en contacto con él y preguntarle directamente por el asunto, pero el concejal no nos volvió a contestar la llamada a pesar de que le dejamos varias razones. Igual, le escribimos al embajador, al señor Olaya, al señor Flórez Arcila y a la cónsul Lozano, y esperamos sus comentarios en vano.
El asunto es que hay testigos presenciales de los devaneos amorosos del masajista y “auxiliar diplomático” Jaime Olaya con el embajador, en la cocina del cuarto piso de la embajada (que es donde queda la residencia del embajador); esos testigos cuentan cosas demasiado escabrosas como para repetir aquí, pero todos coinciden en que la Embajada de Colombia en Rusia se ha convertido en un antro de perdición homosexual, muy parecido a ciertos departamentos de la administración Distrital en Bogotá.
Además del Ministro Consejero Rubén Darío Flórez Arcila, del masajista y auxiliar diplomático Jaime Olaya Amado, y del mismo embajador Rafael Amador, hay otro que se une a este trio de presuntos descarriados. Se trata, según las denuncias, de un señor llamado Miguel Palacios, un cura ortodoxo que es hijo de colombiano y rusa, y que aporta las bendiciones para estas cosas de gays y cuya doble moral es objeto de chistes por parte de los otros tres.
En resumen, el embajador Amador debería responder por las acusaciones de utilizar dineros de los contribuyentes para suplir de lujos y detalles los caprichos de su amigo el masajista quien, además, es funcionario de la embajada, con las inhabilidades que se achaca por ser amante del embajador.
Aseguran nuestras fuentes que el señor masajista Jaime Olaya no habla ruso y que todo lo hace la señora Natalia Vladimirovna Rodyguina, una ciudadana rusa que es quien realmente maneja la embajada de Colombia en Moscú. Cualquier colombiano que desee hablar con el embajador Amador debe pasar por el filtro de Olaya y de Vladimirovna Rodyguina; ellos dos son quienes deciden quién tiene derecho a hablar con el embajador y quién no. Vladimirovna Rodyguina lleva más de 25 años trabajando en la Embajada y fue nombrada en unas imputaciones que le hizo un señor Antonio Hurtado en la época de Miguel Santamaría Dávila.
Sería interesante revisar el sistema de video-vigilancia de la embajada. Aunque no hay cámaras en el garaje ni en las escaleras traseras, algo debe haberse visto por ahí.
Las autoridades rusas están muy molestas con las actuaciones del cuarteto. Allá tienen fotos y videos.. pruebas de cuán involucrados están el embajador y sus amigos en estas fiestas y servicios sexuales que son mal vistos en Rusia. Los rusos saben muy bien cómo y cuándo entran a los homosexuales a la embajada de Colombia y no saben ya qué más hacer para que esto termine.
Lamento mucho la situación de los pobres estudiantes que tienen que soportar estas cosas. La homosexualidad de nuestra clase política es un
hecho ya por todos conocido. Entiendo que políticos, presidentes, congresistas, directora del Sena, alcaldes o lo que sea tienen derecho a acostarse con quien les venga en gana, pero cuando sus preferencias sexuales son usadas como política pública o mecanismo de poder y manipulación para someter, desde un cargo privilegiado, a subalternos o necesitados a las aberraciones del empleado público, ya el asunto nos compete.
Insisto en que, para cargos de esta naturaleza, los candidatos deberían hacer expresa sus preferencias sexuales anormales. Igual que deberían hacerlas públicas los candidatos al Congreso. El poder gay se ha tomado el control de Colombia desde hace rato y los votantes seguimos eligiéndolos, ya sea por ignorancia o por despreocupada complicidad.
A este paso, las minorías heterosexuales vamos a tener que empezar a hacer marchas para exigir nuestros derechos. ¡Qué horror…!
Cuidado, ciudadanos rusos… La marikostroika criolla santista llegó a Moscú.
@ricardopuentesm
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