LA ERA DE LA DETENTE

LA ERA DE LA DETENTE

Por Rafael Gómez Martínez

Un día, quienes vivimos en Paris durante el verano de 1982, nos despertamos con la noticia de que la URSS apuntaba sus temibles misiles SS 20 con ojivas nucleares hacia Europa y los EE.UU.

Revel, autor del clásico libro Cómo se terminan las democracias, comentaba que la URSS lo que buscaba con los diálogos por la paz mundial era distraer su verdadero objetivo.
Revel perteneció al grupo de famosos intelectuales de izquierda que se conoció en la década de los setenta como la gauche du caviar et le champagne.

En Latinoamérica, la plaga de intelectuales iluminattis de Oxbridge, como diría Enrique Millán, se extendió por todo el continente. El peruano Eudocio Ravines, fue un marxista clase A, por ejemplo. Ellos, Ravines y Revel, conocieron a la perfección cómo se manipula, se desinforma y se promueve la batalla ideológica para desgastar al oponente por parte de la Nomenklatura moscovita de la época.

Cómo se utiliza la semántica para debilitar psicológicamente al enemigo: “quien no quiera la paz, tiene que estar enfermo mentalmente”, dijo recientemente Santos Chamberlain. Quien ahora cuenta con doctrina propia. ¿Gracias a Enrique Santos?

Al mismo tiempo que la URRS promovía la paz mundial, Moscú impulsó la modernización de su aparato militar. Incluía el desarrollo de la tecnología nuclear de corto, mediano y largo alcance. La crisis de los misiles en Cuba fue el primer envión.

Revel se pregunta: “¿qué había obtenido Occidente hasta ese momento en las negociaciones con los rusos? Nada. Rien du tout”.

Para 1982, la dignidad europea quedó supeditada a los intereses de los soviéticos. En el 2011 la dignidad colombiana está sumisa a un puñado de dólares chavistas, que no nos dejan ver sus verdaderas intenciones. La estrategia funciona a la perfección.

Llegamos, entonces, al verano de 1982 más débiles que nunca. Los colombianos en el 2011 tenemos a los iraníes y los rusos desarrollando el Programa Nuclear venezolano.

Cuando vi la noticia del diario alemán Die Welt, sobre la instalación de una base militar iraní en Venezuela en el Estado Falcón con plataformas para el lanzamiento de misiles, tuve la misma sensación del verano de 1982.

Y la Planta de Energía Nuclear, pero nadie pregunta. Porque preferimos pasar la página, según Madame Holguín. Caímos en la amnesia tranquila.

En el 2011, en la era de la Detente, la sociedad colombiana se encuentra más vulnerable que nunca. Mientras tanto, Chávez gana tiempo. Ahora tiene unos coheticos.

200 personas secuestradas en el Chocó. ¡200! Por lo menos, Germán reaccionó. Tremenda paliza le dieron al PSOE en España. Y Santos cómo va… Y con los favorcitos de la CSJ, como para qué enemigos. Con ellos nos sobra. El torero se quedó sin la muleta.

Puntilla. Me pregunto ingenuamente: ¿toda esta rendición incondicional por un premio Nobel de la Paz?

Mayo 29 de 2011