PRIMERAS REFORMAS EN CUBA (II)
Mientras tanto, en Colombia nuestra clase dirigente empresarial, política, mediática, teniendo como espejo a su vecino venezolano hace la del avestruz. Mete la cabeza en el hueco con tal de no ver la nueva realidad
Primeras reformas en Cuba (II)
Mientras tanto, en Colombia nuestra clase dirigente empresarial, política, mediática, teniendo como espejo a su vecino venezolano hace la del avestruz. Mete la cabeza en el hueco con tal de no ver la nueva realidad
Por Rafael Gómez Martínez
Junio 10 de 2017
Las tres reformas más relevantes una vez Fidel Castro en el poder fueron: La ley de reforma agraria, ley de reforma urbana y las nacionalizaciones. Las nacionalizaciones fueron la tercera, consistente en expropiar todas las empresas norteamericanas que se encontraban en la isla.
¿Qué es lo primero que se hace? Comenzar con un conflicto, entre el poder real vs el pueblo vs quienes están en contra de la revolución. ¿De dónde se sacarán los argumentos si no es de la confrontación?
El punto de partida económico es que todos los factores de producción: tierra, trabajo, capital, deben estar en manos del Estado. De la revolución. Desde ahí, se debe comenzar el conflicto asfixiando al sector privado con reformas progresivas tributarias en una primera instancia. ¿No, les parece un dejá vu?
Una vez impulsado el proceso de destrucción económica se comienza a perder el sentido de pertenencia, la ética del trabajo individual vs lo colectivo a cambio de los subsidios del Estado.
Llega un momento en que se legitima la revolución o te paras. Lo que llaman en la estrategia militar el punto culminante. O se destruye todo lo que había del anterior sistema para el bien de la revolución o te paras.
Una vez coaptado el poder se radicaliza el discurso. Se adoptan posiciones tales como o estás con la revolución o no estás. O estás con el proceso de paz o no estás. Alguna vez Chávez dijo que la revolución bolivariana del socialismo del siglo XXI es inevitable, quien se oponga a lo inevitable será arrasado por lo inevitable.
Así, como para Adolfo Hilter Mein Kampf fue la radicalización de su discurso para Fidel Castro la Declaración en La Habana fue su punto culminante donde pasó de un tono conciliador, light, para producir la metamorfosis de Kafka donde el mosco se convierte en un monstruo, Hidra, de ocho de cabezas. La Hidra se va engordando, por cada cabeza salen 7 más y así sucesivamente
Posteriormente, se pide al Congreso existente poderes constitucionales extraordinarios – fast track-. Con los poderes constitucionales extraordinarios se genera un enfrentamiento verbal, en primera instancia, violento, en segunda, donde se pasará por encima de cualquier individuo que esté en contra de la revolución.
Fidel y su régimen de facto nacionalizó todo lo que pudo: refinerías, latifundios, empresas turísticas, casinos, hoteles, sector financiero. Chávez fue un Castro recargado porque además contó con la mala fortuna de un periodo de precios de petróleo altos los cuales utilizó para nacionalizar la economía venezolana con el fin de volverla dependiente del Estado, de la revolución. Chávez, nacionalizó más de 15.000 empresas productivas.
Cambian los tiempos, cambian los personajes, las estrategias siguen las mismas.
Mientras tanto, en Colombia nuestra clase dirigente empresarial, política, mediática, teniendo como espejo a su vecino venezolano hace la del avestruz. Mete la cabeza en el hueco con tal de no ver la nueva realidad en que nos encontramos gracias al proceso de paz de JMS y su régimen.
Mucho me temo que ya es muy tarde para reaccionar y que no habrá elecciones en el 2018.
Puntilla: Dos atentados terroristas en Londres dejan 9 muertos, 20 heridos, en Manchester otro tanto, pero lo importante es el cambio climático.
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