DE REGRESO AL CAGUÁN
El show mediático montado por el general Naranjo para contrarrestar la inseguridad y la violencia en Bogotá fue flor de un día. ¿Dónde está Samuel?
DE REGRESO AL CAGUÁN
Por Rafael Gómez Martínez
EL país regresa lentamente al Caguán. Porque de regalo de fin de mes en la Bogotá de Samuel, nos ofrecieron un disturbio pedagógico los que se dicen ser estudiantes de las universidades públicas.
Como la Policía y el Smad no pueden ingresar a esos centros de reclusión, por aquello de reclutar a menores de edad, donde se han formado una serie de repúblicas independientes como lo denunciara Álvaro Gómez; los ciudadanos de a pie, como el suscrito, quedamos inermes.
Los encapuchados sí pueden poner en jaque a toda la ciudad. ¿Alguien sabe dónde está Samuel? Además, a los jovencitos hay que respetarles su derecho a la protesta. ¡Hágame el favor!
Garzón, comenta que hay que agotar todas las instancias del diálogo. ¿Dialogar con quién, señor Garzón?
Ni quiero pensar cómo serán las del 7 y el 9 de abril. Dos en una.
No se escucha a los señores rectores de las universidades públicas rechazar de forma unánime estos actos. Es más: pareciera que los avalaran.
En nivel nacional, Rangel comenta que “hay un deterioro de corto plazo en la seguridad del país, de continuar esa tendencia nos llevará a un verdadero deterioro”.
El show mediático montado por el general Naranjo para contrarrestar la inseguridad y la violencia en Bogotá fue flor de un día. ¿Dónde está Samuel?
En Santander, quemaron dos tractomulas. El Cauca se encuentra sitiado. En un pueblito cercano a Tuluá, las Farc pusieron dos camiones con cilindros de gas y una carga explosiva.
En Medellín, el joven y valiente Campuzano, candidato a la Alcaldía, denuncia el incremento de la violencia y del microtráfico de drogas. Los buses no quieren subir más a las comunas.
En Gramalote, la gente se está muriendo por el abandono del estado, en minúscula. A Córdoba enviaron una tractomula cargada de ayudas, que nunca llegó. A Mosquera, el estado la abandonó. Y se viene en dos meses un invierno peor.
Se encuentran uniformes venezolanos en Arauca. Al día siguiente vuelan una torre de energía. A Santos Chamberlain, le están haciendo conejo.
Pero el señor Rivera considera que las relaciones con Chávez van por buen camino y que no se harán persecuciones en caliente en las zonas de frontera, mientras que el Gobernador del Táchira denuncia en solitario la presencia de los grupos armados ilegales en la zona.
No estamos lejos de negociar una zona de ocupación, como ocurrió en la France de Vichy. En muy poco tiempo tendremos a los grupos ilegales armados gobernando en las zonas de fronteras. O en el Páramo de Santurbán, donde se dejaron meter un gol mayúsculo.
Estoy de acuerdo con Santos, el de la revista Semana: tal vez el ministro Rivera no se encuentra debidamente informado.
Puntilla. El país de regreso al Caguán. Y Cano nada que aparece. Y se viene lo de Makled con una fuerza….
Abril 09 de 2011
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