GUERRA Y PAZ

Guerra y paz

Por Rafael Gómez Martínez

Agosto 30 de 2012

León Tolstoi escribió dos obras literarias máximas: Ana Karenina entre 1873-1877 y Guerra y paz escrita entre 1829 y 1910, su obra cumbre.

En Guerra y paz Tolstoi describe cómo fue la vida de 4 importantes familias moscovitas durante 50 años. Son 50 años de historia rusa.

Allí se encuentran consignados 3 episodios que marcaron el devenir de Europa: la batalla de Austerlitz, la campaña napoleónica en Rusia y la derrota de los ejércitos franceses en Moscú.

Me doy a la tarea de revisar sobre el origen de la paz post napoleónica y solamente encuentro una razón. Según Shanon, debe existir un vencedor claro y una derrota contundente del enemigo para que se pueda firmar la paz.

En Moscú, Napoleón sufrió la peor derrota y humillación que tuviera durante su vertiginosa carrera militar. Solo así se firmó la paz napoleónica.

Santos nos anuncia la paz. Y, como no le queda otra carta, se la jugará a fondo. Cueste lo que cueste. Desde estas líneas de opinión le solicitamos a Santos en varias ocasiones que le dijera la verdad a los colombianos.

Las reacciones no se hicieron esperar. El gelatinoso Roy Rasputín Barreras lo apoyará incondicionalmente. Los Partidos políticos, también. El rancio Partido Liberal ya se acomodó.

Lamentable el silencio cómplice de mi Partido Conservador. En vez de asumir una posición crítica frente al gobierno Santos, sus directivos, senadores y representantes guardan un pasivo silencio cómplice.

Las frívolas matrices de opinión bogotanas hacen lo suyo. ¿A cambio de qué? El mejor editorial es un aviso, decía el tartufo mayor.

La historia nos recuerda cuán grande puede ser una caída. De La Uribe a Tlaxcala, a Maguncia, al Caguán, a Oslo, a La Habana. Para viajar gratis sí son buenos.

Según Hollman Morris en Canal Capital, llevan más de 30 reuniones a espaldas de los colombianos. Según Telesur, ya estaría firmado un preacuerdo. El negocio ya se hizo.

Un oyente en La W Radio comentó que Colombia lleva más de 50 años de conflicto interno y que todo lo que se haga para alcanzar la paz es válido. ¿Todo? ¿Bajo qué condiciones? ¿A qué costo?

Ya Nicolás Gabino del Eln dijo que no están dispuestos a ceder en el tema de la extorsión, el secuestro, ni a dejar las armas. Debemos suponer que esa misma posición tendrán las Farc. Entonces: ¿para qué negociamos?

Como no se quiere derrotar al enemigo contundentemente, seremos nosotros los que nos quedaremos con la humillación y con la derrota. Ese será el costo. Se vienen tiempos difíciles. Preparémonos. Y no tenemos a Churchill.

Puntilla. ¿Puede un menor de edad ingresar a las FF.MM. violando el DIH? History recalls, how great the fall can be, while everybody is sleeping, the boats pulls out to sea…