HÉCTOR FORERO, UN LIBRETISTA QUE VIVE SU HISTORIA

HÉCTOR FORERO, UN LIBRETISTA QUE VIVE SU HISTORIA

Todos estamos de acuerdo en que una buena historia, ya sea en cine o en televisión, siempre requiere de un buen guión. Por ello, se anda en la búsqueda de una fórmula de éxito para que esta parte fundamental logre atrapar una audiencia cada vez más esquiva y dispersa.

Entre los conocedores del oficio de escritor, sin duda alguna podemos citar a Héctor Forero, un colombiano que hoy reside en México trabajando para TV Azteca…. el sueño que muchos quieren alcanzar.

Encontrarlo con tiempo disponible es difícil. Pero aceptó hablar con nosotros durante unos minutos.

PERIODISMO SIN FRONTERAS: Quienes te conocemos desde “Padres e Hijos”, muchos hemos visto últimamente una faceta tuya algo desconocida, mucho más espiritual.. ¿Qué sucedió para ello?

HÉCTOR FORERO: Pues la faceta espiritual siempre ha estado. Imagínate que estuve viendo unas entrevistas que tenía guardadas desde hace años, cuando tenia como veintitantos.. y me puse a pensar… Yo he perdido un poco de esa parte espiritual… Ahora lo que he hecho es retomarla, pero siempre ha sido así… Quizá en ese momento era más tímido para mostrarla.. Desde luego, influyó mucho el proceso que viví de enfermedad y el sentir que la vida es cortica y que hay que cambiar la perspectiva con la que la ves.

PSF: ¿Enfermedad..? ¿Qué enfermedad?

HF: En el año 2003. Tuve un cáncer muy fuerte.. Fue un año duro, de revaluación de muchas cosas. y como un nuevo empezar..

PSF: Un cáncer son palabras mayores.. ¿Cómo sanaste?

HF: Con quimioterapias, mucha ayuda espiritual, mucha fe y un deseo y una decisión clara de seguir viviendo.. En ese momento sentía que aún me faltaban muchas cosas por vivir… Quizá por eso ahora dejo ver más mi parte espiritual…M Antes, como te digo era tímido, pero siempre he sido muy de la onda espiritual.

PSF: ¿Sentiste la muerte cerca..?

HF: Nunca se siente cerca, es decir, se sintió cerca cuando escuchabas a los médicos.. O cuando te desmayas… o en las transfusiones de sangre… En todos esos momentos, por el dolor, por la debilidad… sientes que pasa algo muy fuerte… Pero en ese momento me convencí de muchas cosas que hoy me permiten pensar que la muerte como tal no es más que una continuación del camino.. Es decir, como tal, no creo que exista la muerte, existe luz, verdad al otro lado.. Son extrañas las conclusiones a las que llegas… pero la más fuerte de todas es que la muerte como tal, no existe para quien en teoría se muere… Existe una transformación, un paso, un avance a algo..

PSF: ¿Sucedió algo extraordinario en esos momentos…? Algo que te haya movido a una re-búsqueda espiritual? O solamente fue una especie de regreso al camino.

HF: Si, muchas cosas espirituales… La más grande, el enfrentarse a la soledad, manejarla, sentirla.. La persona que enfrenta una enfermedad, puede estar rodeada de mucha gente, yo tuve la suerte de estarlo, pero el dolor, la tristeza, la angustia, todas esas cosas las debe enfrentar solo el paciente..

PSF: Eres mariano, ¿cierto?

HF: Yo si, soy católico.. Creo mucho en Jesús, en todo lo que implica Jesús, amor, perdón, paz.. y tengo un nexo desde niño con la Virgen de Guadalupe.. De hecho trato de visitarla lo más que puedo.

PSF: ¿Qué tipo de nexo?

HF: De confianza, de cariño… La advocación de la Virgen de Guadalupe, lucha o quiere hacernos ver que el miedo y los miedos son ilusiones que tenemos en nuestra mente, ilusiones en las que decidimos creer.. pero que si en verdad tenemos fe en Jesús, que es el amor mismo… No tenemos por qué temer.. Eso lo llevo desde niño..

PSF: ¿Pero alguien te enseñó sobre la virgen de Guadalupe..? ¿Alguien de tu familia era devoto de ella?

HF: Es muy curioso. Cuando yo era niño vivía en el campo, en una vereda lejana… generalmente botaba los lápices en la escuela… Siempre botaba los lápices. Un domingo, que teníamos que hacer la tarea, mi madre un domingo me dijo… “Esto se acabó, me entrega los lápices o lo castigo.” Y el castigo era una muenda. Yo, asustado, le mentí y dije: “Madre, es que los lápices los dejo en la escuela para no botarlos.”  Y ella me va contestó: “!Mentiroso..! Pues si es así se va a la escuela y me trae los lápices, por lo menos el que le di esta semana.. si no me aparece con ese lápiz va a ver…..!  Era un domingo a las cuatro de la tarde. Yo me fui asustadísimo, caminando hasta la escuela que quedaba a un par de horas de camino, y decía: “¿Ahora a quién le pido..? Yo no tenía un concepto claro de Dios para ese entonces. Creo que tendría unos seis años.  Así que, en el camino ¿qué crees..? Me acordé de una novela que yo veía, la protagonista era Verónica Castro, y ahí ella le pedía a la Virgen de Guadalupe noche y día. Así que yo dije.. Pues si a ella que tiene más problemas que yo, le funciona, ¡a mí me tiene que funcionar..! Entonces, comencé a pedirle en el camino a la Virgen de Guadalupe… todo el tiempo.. “Por favor, que encuentre un lápiz, que encuentre un lápica.. sólo uno, y líbrame de la fuetera que me dará mamá por botar los lápices”. Al llegar a la escuela el maestro me abrió la puerta… me regañó por desordenado y me dijo: “Yo no he visto ningún lápiz, así que no sé que vienes a buscar.” En mi mente sentí que alguien me dijo algo: “No busques en tu pupitre. Agáchate y pasa los ojos por todos los pupitres.” Yo hice caso.. ¿Y qué crees..? ¡Llegué a la casa como con seis u ocho lápices…! Los que me cabían en la mano.

PSF: ¿Y que dijo tu madre..?

HF: Yo le dije a mi mamá: “Me debes una disculpa.. Me dijiste mentiroso..” (Risas)” Desde ese entonces, dije.. “mmmmm… Esta Virgen va a ser mi parcerita.” Y ha sido una fe y un cariño así bien bonito. Es como si fuera alguien de mi familia.. De hecho no soy muy de andarle rezando, soy más de hablarle, de contarle, de recordarle…

PSF: Curioso que por una novela mexicana hayas llegado a esa fe hacia una virgen también mexicana, y que ahora estés precisamente triunfando en tierra azteca…

HF: Si… Fíjate Ricardo que ahora fui a hacer una vuelta, y de regreso me vine caminando y sentía el aire fresco de la mañana (en este momento ya está hirviendo) y decía.Dios, a mi como me gusta este país. Desde que vine la primera vez me ha gustado mucho.. Y puedo decirte que jamás busqué venir la primera vez, luego que lo pisé dije:” mmmmm… Qué hay aquí que me gusta tanto..?

PSF: ¿Y qué hay?

HF: Magia, cultura, tradición… esencia. Son ellos, son los mexicanos. Sin más.. Bueno, además de que me gusta su música y otras cositas.

PSF: ¿De qué lugar de Colombia eres..?

HF: Nací en Bogotá pero me crie en Bucaramanga.. De hecho, mi acento, mis costumbres, todo es santandereano. Soy apasionado por esa tierra. No he perdido el acento; por el contrario, aquí me gusta usarlo mucho cuando quiero remarcar de dónde soy, y me divierte porque a la gente le cuesta decir ‘Bucaramanga’. Hay quienes me dicen: “Ese tipo es extraño, como extraño es el nombre del lugar de donde viene..”

PSF: (Risas) Bien… ¿Cómo llegaste a México, cómo empezaste a trabajar allí..?

HF: La oferta se dio hace unos trece años en caracas, aproximadamente. Hubo un foro sobre las telenovelas e iban muchas figuras del medio a nivel latinoamericano. Para mi fortuna, faltó un conferencista y me pidieron que hablara sobre lo que en ese momento era el fenómeno del seriado “Padres e Hijos”.

PSF: Hay que aclarar a los lectores de otros países, que “Padres e Hijos” fue un seriado que duró muchos años en Colombia, con gran audiencia.

HF: Así es. Entonces, me llamaron para hablar del seriado, y después, al bajarme del estrado, un par de ejecutivos me contactaron y me propusieron que viniera a México; me hicieron una buena oferta económica pero en ese momento no me interesó.. Algo me movió a decir que no me interesaba trabajar fuera de mi país. Entonces, ellos me dijeron que al menos viajara a México a conocer el país. Yo accedí sin tanta expectativa pero, al llegar, me enamore del Distrito Federal. Sin embargo, aún así no quería trabajar aquí porque en ese momento tenía muchos proyectos en Colombia… Ahora que lo pienso, creo que era que me faltaba vivir muchas cosas en Colombia.. Cabe anotar que siempre he sido un obsesivo con el tema Colombia, soy un enamorado de mi país.

PSF: ¿Eso fue antes de tu cáncer?

HF: Sí, mucho antes…

PSF: Entiendo… Y, entonces, ¿cómo llegas a México…? ¿Cómo tomaste la decisión?

HF: Eso fue hace tres años.. Vine por una razón de peso y de vida. Necesitaba un lugar donde comenzar de nuevo mi historia. Me tardé nueve años en tomar la decisión, pero no podía seguir en Bogotá porque por la enfermedad y muchas otras cosas en mi proceso de vida necesitaba empezar en un lugar donde no tuviera historia.. El no tener historia es estar en una calle y sentir que esa calle es virgen para ti, que puedes comenzar de nuevo. Y así fue con todo..

PSF: ¿Y rompiste con tu historia…? Es decir, ¿es posible hacerlo?

HF: Si, fíjate que sí.. Además, laboralmente.  Tú sabes que había hecho muchas cosas en Colombia, novelas, seriados…. Me había embotado; necesitaba aire para seguir. Pero sí, es posible comenzar de nuevo.

PSF: ¿Has triunfado en México…? ¿Te ha dado ese país algo que no te haya dado Colombia..?

HF: Sí, Yo diría que estoy haciendo el curso, más que decir que he triunfado. Para mí, el triunfo es el camino mismo.

PSF: Perdón que insista: ¿Qué te ha dado México que no hayas tenido en Colombia?

En ese momento le entran algunas llamadas telefónicas. Mientas atiende, recuerdo la primera vez que vi a Héctor. Yo estaba en el equipo de “Vuelo Secreto”, una sitcom, y estaba en la oficina de Hernando Martínez, un maestro de maestros en la construcción dramática, recibiendo algunas correcciones que él hacía a un libreto que le entregué. Héctor entró sin anunciar y Martínez me lo presentó como un abogado, y libretista de una novela que estaba al aire. Años después él escribía su último capítulo en Padres e Hijos y yo ingresaba a ese equipo con el siguiente capítulo. Después coincidiríamos en Tevecine. Héctor siempre me pareció una persona cálida y con su cuento muy claro. Sabía lo que había que hacerse en el arte de construir un libreto.

HF: (Regresa y me saca de mis pensamientos) Disculpa, sigamos…

PSF:  Te preguntaba qué te ha dado México que no hayas tenido en Colombia..

HF: (No lo duda) Paz. Mucha tranquilidad a nivel personal.  Por lo que te decía antes, aquí pude empezar de cero en muchas cosas. En la parte laboral, he ganado mucha experiencia. Ya he participado en tres telenovelas, me conocen a nivel de productores, no todos, obvio, pero si me he dado a conocer. Publiqué dos libros, uno con editorial Planeta – Diana y el otro con Felou.

PSF: Excelente… (sé que no le gusta mucho hablar de política, pero le pregunto) ¿Cómo se ve a Colombia desde lo lejos…? Cómo se percibe nuestra situación interna? Hablo desde el punto de vista de un colombiano en el exterior..

HF: Pues, a nivel televisión siento que estamos avanzando muchísimo. Quizá en las temáticas nos devolvimos desde el punto de vista comercial… pero creo que el camino avanzado es bueno. En todo lo demás, Colombia es un país que ejerce mucha atracción para la gente. Por lo menos, aquí siento que nos miran con cariño, con respeto y la gente tiene un deseo inmenso de conocer el país.

PSF: (No permito que se escape) ¿Te atrae el tema político colombiano?

HF: Pues a ver… La política me genera respeto, me parece un medio difícil, un medio en el que no sólo están involucradas las cabezas políticas, sino el pueblo entero. A mí me parece que no son los políticos los buenos o los malos.

PSF: ¿Entonces?

HF: Lo que sucede es que la gente que los elige tiene intereses tan personales, funestos y concretos que es difícil para un político tener un plan claro. De diez personas que votan por un político, podría decir que siete, quieren algo a cambio de su voto. Lo digo porque he participado en campañas políticas, tengo amigos políticos, y siempre digo. “Dios, ¿cómo hacen para aguantar..? Si les piden todo, les quieren exprimir hasta lo mínimo…!”

PSF: (Risas) ¿Alguna preferencia para las elecciones presidenciales?

HF: Pues sólo te digo una cosa… No creo en salvadores. No creo en que todo lo anterior haya sido malo. No creo que vayamos a cambiar de la noche a la mañana, y no creo en promesas montadas porque los fanatismos me parecen peligrosísimos.

PSF: Bien… regresemos a nuestro interés… ¿Crees que aquí hay libretistas de talento..? O más bien pocos..

HF: ¡Uy no..!  ¡Colombia es una mina de talento…! Te lo digo porque he sido maestro de libretos hace muchos años y veo el talento brillar. Además, Colombia tiene algo interesante y es que a nivel de productores, aunque no parezca, el respeto al escritor es muy grande.

PSF: Entonces, ¿por qué siempre en las producciones, aparecen los mismos nombres..?

HF: Ricardo, porque generan confianza. La televisión mueve muchos millones, muchos, y un libretista es responsable de que esa inversión por lo menos aparente estar garantizada, por varias cosas, la historia, las entregas de libretos, la calidad y el contenido…contenido a nivel comercial. De repente hay muchos escritores que quieren innovar, o a los que les cuesta el lenguaje televisivo. Pero fíjate una cosa, yo tengo la idea que por lo menos, en éstos últimos años, han entrado muchos nombres nuevos. Tenemos a Guido Jácome, Felipe Forero, Juan Camilo Ferrand, Claudia Neira, Gina Sánchez… Son gente nueva que esta metiéndose en proyectos interesantes.

PSF: Bien… ¿Alguna recomendación para quienes piensan entrar en este competido mundo?

HF: Que se lo tomen en serio y crean en él. Mira que a mi lo que más me cuesta con mis alumnos es que tengan fe en si mismos. Que crean que esto es una carrera y se puede vivir de ella. Que tengan el coraje para aceptar mil NO y esperar con paciencia un único SÍ.

PSF: Bueno, Héctor… una última cosa… No extrañas a tu familia aquí?

HF: Demasiado. No tienes idea cuánto. Extraño todo.. la ciudad, mi casa, mis cosas…. pero lo que más extraño es el contacto con mis hermanos, con mis amigos… Soy excesivamente amiguero, demasiado amiguero. Y por supuesto, extraño a mis sobrinos… Ese es el precio más alto que he pagado por estar aquí. Aunque soy un tipo tranquilo, que trabaja el desapego, te mentiría si te dijera que muchas veces no me ha costado lágrimas estar lejos de ellos. Pero fíjate, es curioso porque es como si todo eso estuviera en una balanza; en un lado todo lo que es importante para mi,  y en la otra parte yo, con mis sueños, con mi paz interior… con mis razones para estar aquí. Entonces, he tratado de que se mantenga el equilibrio. Voy a Colombia cada vez que puedo.

PSF: ¿Dictas talleres de libretos en Colombia?

HF: No señor. Ya dejé de hacerlo, hace como un año, mas o menos, por dos cosas: Una, el tiempo, en una semana me quedaba haciendo falta el contacto con la gente, entonces creé una escuela online…y no tienes idea, es mucho mejor.. puedes trabajar directamente con el alumno. Y hacerle un seguimiento más concreto..

PSF: ¿Qué dirección tiene esa escuela?

HF: escuelahectorforero@gmail.com Se trabaja por entregas, vía chat.

PSF: Bueno, Héctor… Muy amable por tu tiempo…

HF: Ricardo, gracias a ti…

PSF: Una cosa más…

HF: Dime..

PSF: ¿Quién es Héctor Forero para ti..?

HF: (Piensa un poco) Mmmm.. Yo diría que Héctor Forero es un tipo que aprendió a disfrutar las simples cosas de la vida, que aprendió que la competencia es consigo mismo… Que aprendió que la realidad no es la que vemos sino la que esta en nuestra mente y nos hace disfrutar o sufrir. Un tipo que sabe que todo es posible si en verdad es importante para nosotros y que con el tiempo aprendió a valorar más el aire que el diamante. Más o menos, así lo veo… o así me veo. Soy bien raro ahora, es decir, del que era antes a éste… ufff… hay un puente extraño. Quienes no me ven hace años y me vieran ahora, dirían: “Este man qué onda..” Porque vivo muy, pero,muy tranquilo.

PSF: Sí Héctor… se te nota muy “onda..”  Abrazos, hermano…  Gracias por todo…

HF: Un abracito, Ricardo, que Dios te bendiga y gracias.

Mayo 10 de 2010