URIBE PRESO, PAGA SU TRAICIÓN A LAS FARC
4 años hace Ricardo Puentes MeloInmediatamente vendida la victoria del NO, Uribe empezó con sus coqueteos y poemas con miembros de las FARC y del Partido Comunista, creador de las narcoguerrillas en Colombia. Llamó a la fraternidad, al perdón, a la convivencia, y a cuanta tontería marxista se le cruzó por la cabeza. Sus seguidores aplaudían a rabiar cada ocurrencia de Uribe y usaban eso de prueba para demostrar la grandeza del corazón de Álvaro Uribe
Por Ricardo Puentes Melo
Agosto 6 de 2020
@ricardopuentesm
ricardopuentes@periodismosinfronteras.com
Sandra Ramírez, la ex concubina de Tirofijo, es una terrorista. Eso es algo que no puede ocultarse. Es algo que no debe ocultarse.
En días pasados, el país pasó del estupor de ver a un supuesto líder de derecha, Álvaro Uribe, alabando el nombramiento de la narcoterrorista como vicepresidente del Senado, hasta ver -en cerca de una semana, cómo ese “líder de derecha” era puesto preso por una Corte evidentemente sesgada e izquierdista.
Hay que ir por partes y traer a colación lo que hemos explicado acá muchas veces. Uribe es un hombre de izquierda que se camufló en una falsa derecha para adelantar el proyecto pactado en la Fundación Buen Gobierno, ordenado por los Castro, para someter a Colombia a los pies del comunismo liderado por Cuba.
La eterna pregunta que causa confusión en las huestes uribistas: ¿Cómo es posible que Uribe sea de izquierda si él combatió a las FARC?
La respuesta es sencilla: Álvaro Uribe combatió a cierto sector de las FARC (no a todas las FARC) porque estaba vengando el asesinato de su padre a manos de esa banda. Si bien Álvaro Uribe era un hombre de izquierda, es entendible que rompiera la debida lealtad correligionaria para dar de baja, usando el poder del Estado (desde la gobernación de Antioquia y luego desde la presidencia de la República) y las armas del Ejército para adelantar su proyecto de venganza.
Tan cierto es esto que, al mismo tiempo que el Ejército combatía a las FARC, Álvaro Uribe llenaba de prebendas a los cuadros políticos de las FARC, ELN, EPL, M19 (ya “desmovilizados”) y los convertía en sus asesores más cercanos. Igual hizo con generales de la Policía corruptos y narcotraficantes, militares, etc. Los seguidores, ante esta disyuntiva evidente, solo recibían la respuesta mesiánica de Uribe: “mis hijitos, es que yo no soy hombre de odios y tengo un corazón muy grande.” Y estos se tragaron el cuento.
No se debe olvidar que Uribe siempre militó en la izquierda, y que hizo sus campañas políticas de la mano de éstas, siempre. Engañó, también siempre, a sus colaboradores de derecha -que terminaron en la cárcel- mientras que sus reales copartidarios, también del círculo de Pablo Escobar, no sufrieron ni un rasguño.
No repetiremos esto. Quien desee, puede buscar los artículos en este portal. Acá hay uno de tantos: Uribe nos ve la bobera)
Uribe entendió su error de pasarse por la faja las órdenes del Partido Comunista (perdonar a las FARC la baja de su padre) y, durante su gobierno, cuando supuestamente combatía a las FARC, continuamente les enviaba razones, los llamaba a hacer acuerdos de paz… les pedía perdón. La prueba de esto está en los numerosos videos y entrevistas donde el mismo Uribe reconoce haber buscado a las FARC y el ELN para negociar, y en documentos de inteligencia aún no revelados que este suscrito tiene en su poder y que formarán parte de un libro sobre la historia del “Proceso de Paz” que está en redacción.
Entonces, Uribe siempre buscó el perdón de la izquierda. Pero este perdón jamás llegó. El mismo Timochenko suelta algunas perlas en una entrevista en la que se refirió al tema:
Llegó a vender la victoria del NO esperando obtener ese perdón y demostrar a sus jefes ideológicos que aún por encima de las FARC lo que valía la pena era la entrega de Colombia al comunismo, o “socialdemocracia” como él llama eufemísticamente a esa tiranía.
Inmediatamente vendida la victoria del NO, empezó con sus coqueteos y poemas con miembros de las FARC y del Partido Comunista, creador de las narcoguerrillas en Colombia. Llamó a la fraternidad, al perdón, a la convivencia, y a cuanta tontería marxista se le cruzó por la cabeza. Sus seguidores aplaudían a rabiar cada ocurrencia de Uribe y usaban eso de prueba para demostrar la grandeza del corazón de Álvaro Uribe.
Olvidan sus seguidores que, si bien es cierto que Uribe permitió la baja de Reyes (uno de los responsables del asesinato de Uribe Sierra) fue durante el gobierno de Santos cuando se produjeron las bajas más importantes: Cano, Jojoy y otros. Los de la línea dura de las FARC, aquellos que jamás quisieron atender los llamados de Uribe y Santos a dialogar. Y dejaron vivos a aquellos que sí querían: Márquez, Timochenko, Santrich….
Uribe entregó la victoria del NO. Se robó la fe de un país al cuál él le arrebató la vocería del NO, y la entregó a sus copartidarios a cambio del perdón y la impunidad para su familia
La memoria de los uribistas es tan flaca como su cerebro. Olvidaron por completo que Uribe liberó al canciller de las FARC, Rodrigo Granda, hombre clave en la red del narcotráfico de esa banda, requerido por Estados Unidos, junto a más de 250 bandidos de las FARC que él, de manera arbitraria, sacó de las cárceles del país para que siguieran delinquiendo.
Esa es la catadura del “muro de contención del castrochavismo”.
La concubina de Tirofijo llega al Congreso de la mano de Uribe. Fue la gestión suya la que dio resultado. El mismo Álvaro Leiva lo dijo en medio del proceso de paz: “El proceso de paz debe pasar por las manos de Álvaro Uribe”. Las FARC, Cuba y la izquierda colombiana tenían muy claro, siempre, que un proceso de paz sin la aprobación de Uribe nunca sería una realidad.
Y así fue.
Uribe entregó la victoria del NO. Se robó la fe de un país al cuál él le arrebató la vocería del NO, y la entregó a sus copartidarios a cambio del perdón y la impunidad para su familia.
Pero, como siempre se lo advertimos desde estas páginas, desconociendo que él era parte de los conspiradores contra Colombia, la izquierda castrista jamás le perdonaría las muertes de Reyes y de Tirofijo, quien murió -según documentos de inteligencia- del físico miedo al bombardeo donde cayó “Raúl Reyes”.
El lema de las FARC “Estamos cumpliendo” se cumplió con el apoyo de Álvaro Uribe Vélez. La viuda del creador de las FARC, Manuel Marulanda Vélez se posesionó como vicepresidente del Senado.
Ese “Estamos cumpliendo”, que incluye la posesión de la bandida Sandra Ramírez y la traición a quien los traicionó a ellos, Uribe, tiene que ver con la conmemoración de los 30 años de la muerte de Jacobo Arenas el próximo 10 de agosto. Para quienes no lo sepan, las fechas de aniversarios y conmemoraciones son muy importantes para las mentes fetichistas y agoreras de la izquierda.
Después de poco más de 50 años de delinquir, gracias a la complicidad de políticos y militares corruptos, las FARC llegan a presidir una de las instituciones de la democracia de Colombia: El Senado.
El “Estamos cumpliendo” es igual a “Estamos gobernando”. Y gracias a Uribe.
Los cuadros políticos de las FARC, sus infiltrados en el Ejército y en los gobiernos de turno hicieron posible este adefesio.
Álvaro Uribe, depositario de la confianza de los colombianos, y quien juró ante Dios no permitir lo que ya permitió, es el gran traidor a la Patria que lo hizo posible. Usando el cariño del pueblo colombiano, los llevó como cochinillos al matadero negociando algo que no tenía ningún derecho de negociar: La victoria del NO, la decisión soberana del pueblo, manifestada en las urnas, que exigió la terminación inmediata y sin contemplaciones, de las conversaciones de La Habana, al mismo tiempo que se exigía combatir a los narcoterroristas de las FARC y darlos de baja o llevarlos a prisión.
Pero Uribe, que ha sido elevado a la categoría mesiánica por sus seguidores, convencido de que él es el capataz de la finca llamada “Polombia” por su monigote Iván Duque, creyó siempre que él está por encima de la soberanía republicana, y negoció esa victoria del NO a cambio de prebendas mezquinas para sus familiares mafiosos.
La designación de la concubina de Tirofijo como vicepresidente del Senado, formó parte de esa negociación oculta de Uribe con las FARC, a cambio -lo repetimos- de la impunidad para sus familiares mafiosos, y a cambio de que le perdonaran la vida por haberse atrevido a traicionar los ideales marxistas para vengar la muerte de su padre -un lavaperros de Pablo Escobar.
Ahora, Uribe Vélez, cual reyezuelo de una comarca de estúpidos que lo adoran ciegamente, no tuvo ningún reparo en salir a felicitar a la terrorista por su nombramiento como vicepresidente del Senado. La llama “coherente” y la felicita por el cargo. “Uribe tiene huevo”, dijo nuestra fuente de Inteligencia.
Coherente, para Uribe, es que esta terrorista jure que las FARC jamás hicieron reclutamiento forzado, que no hubo violaciones, que las FARC nunca violaron derechos humanos de nadie, que se desmovilizaron sinceramente, que no buscan el poder mediante la combinación de todas las formas de lucha… En fin. “Uribe tiene huevo”, repitió nuestra fuente de inteligencia.
La verdad es que esta terrorista, a quien nadie le conoce su verdadera identidad, es una asesina que participó, como jefe de comunicaciones de las FARC, en las más horrendas y sangrientas tomas que esos narcoterroristas cometieron sobre Colombia.
Hagamos algo de memoria sobre el papel protagónico que tuvo esta mujer a quien Uribe hoy eleva a la categoría de heroína, en varias masacres de las FARC, según documentos que Inteligencia confiscó a los bandidos:
“-En la vereda EL TABLÓN, municipio de SAN JUANITO (META), tropas de la Brigada Móvil No.1 sostuvieron contacto armado con guerrilleros integrantes de los frentes 31, 51, 53 y 54 y la Compañía Móvil JOAQUÍN BALLEN del Bloque Oriental de las FARC.
RESULTADOS: muerto un Oficial y 15 Soldados. Recuperados 23 Fusiles Galil, una ametralladora M-60, tres lanzadores de granadas múltiples de 40 mm, un mortero tipo Comando de 60 mm y un radio 624.
-Agosto 3 de 1998: Unidades del EMBO de las FARC en La Uribe (Meta): destruidas dos bases del ejército. Resultados: 34 muertos entre ejército y policía, 20 heridos, 8 prisioneros de guerra.
Recuperados: 29 fusiles GALIL 2.23 con 133 proveedores. 2 ametralladoras M-60, 2 morteros, 1 M-79, 2 radios de comunicación, 59 equipos.
-Miraflores (Guaviare). 3 bases de ejército y policía destruidas. Resultados: Muertos y heridos sin determinar. Prisioneros de guerra: 54 policías antinarcóticos y 75 soldados del batallón París.
Recuperados: 176 fusiles, 11 M-79 sencillos, 8 M-79 múltiples, 12 Ametralladoras con 8 calibres de repuesto, 4 Morteros, 500 Granadas de distinto tipo, 94.300 Tiros, 4 Lanzagranadas lacrimógenos, 4 Bazucas desechables, 3 Rockets, 10 Radios de comunicación y 80 Equipos.
-OPERACIÓN MITÚ DE LAS FARC-EP. 01-NOV-1998. Unidades del EMBO, frentes 1, 7, 43, 53 y la Columna Juan José Rondón de las FARC-EP coparon el departamento de policía Mitú [Vaupés]
RESULTADOS: Muertos 15 soldados y 4 policías; Heridos 30 militares y 9 policías. Capturados 61 prisioneros de guerra, entre ellos el coronel de la Policía del departamento.
La toma de Mitú generó una reacción por parte de las Fuerzas Militares para recuperar el área. Unidades del EMBO, el día 2 de Nov. combatieron con tropas de la móvil # 3, policía y aviación que llegaron de refuerzo a Mitú.
Resultados: 28 Muertos y 38 heridos entre soldados y policías.”
Los 30 años del aniversario de la muerte de Jacobo Arenas las FARC lo celebrarán bailando sobre los cadáveres de los colombianos víctimas de esos sicarios de las FARC
La asesina “Sandra Ramírez”, flamante vicepresidente del Senado gracias a los buenos oficios de Uribe y el Centro Democrático, tiene ese prontuario criminal, más otras cosas que luego publicaremos.
El próximo 10 de agosto, entonces, las FARC tenían que celebrar por lo alto el aniversario número 30 de la muerte de uno de sus cabecillas, Jacobo Arenas, y para ello le incumplió el trato a Álvaro Uribe. Es la segunda vez que le asestan un golpe a su orgullo. La primera vez fue Juan Manuel Santos, quien le arrebató el Nobel de Paz al robarle también la iniciativa de los diálogos de paz con los narcoterroristas marxistas.
Pero otra fecha que van a celebrar pronto es la muerte del bandido Manuel Cepeda Vargas (el 9 de agosto, hace 26 años), cuadro de las FARC y padre de Iván Cepeda, enemigo de Uribe.
Qué mejor homenaje para ese par de bandidos que con la reforma al Ejército la aniquilación de la Inteligencia y la Contrainteligencia del Ejército, la humillación de valientes oficiales contrainsurgentes, así como de suboficiales -todos ellos héroes de Colombia- que terminaron presos, heridos, mutilados y humillados a pesar de haber entregado sus vidas en esta lucha por la defensa de la patria, aun en contra de los intereses y acciones maquiavélicas de Pastrana, Uribe, Santos y Duque y demás sinvergüenzas que están convencidos de que somos parte de su plantación de esclavos, que somos su servidumbre.
Los 30 años del aniversario de la muerte de Jacobo Arenas las FARC lo celebrarán bailando sobre los cadáveres de los colombianos víctimas de esos sicarios de las FARC. Esa será la mayor venganza de las FARC contra Colombia. Engañaron a Uribe y éste no tuvo mayor reparo en doblar la cerviz ante ellos obligando a Colombia a postrarse también. “Uribe tiene huevo”, volvió a decir nuestra fuente.
La terrorista alabada por Uribe y el uribismo en el Congreso, coparticipe impune del asesinato de cientos de colombianos, tiene más motivos para celebrar el aniversario de la muerte de Jacobo Arenas: Ella fue su amante, al igual que amante fue de varios cabecillas de las FARC.
Entre los documentos en manos de Inteligencia -que este gobierno y las FARC quieren destruir- se conoce a plenitud que alias “Sandra” era una meretriz de la “ayudantía”, la guardia pretoriana de Tirofijo, y su función era satisfacer las “necesidades básicas” de esos hombres. Igual pasaba con la mujer de Iván Ríos. En ese combo de “juanas” estaba, por supuesto a nivel elevado entre los delincuentes, esta “Sandra Ramírez a quien Álvaro Uribe y el CD se le arrodillaron.
Dice nuestro informante de inteligencia: “Es una humillación para nuestra lucha contra esa escoria, que Uribe -luego de que nos quitó el fueron militar y nos humilló de la peor manera entregándonos a manos de la izquierda, ahora le rinda pleitesía a esa vagabunda, amante de Jacobo Arenas quien le cumplía con lo que el viejito Tirofijo, ya enfermo, no podía cumplirle. Uribe tiene huevo.”
Sí, yo comparto esa opinión. Uribe entregó a Colombia en manos de esos asesinos narcotraficantes a cambio de arrodillarse ante ellos para obtener su perdón. Y miren: terminó traicionado por sus amigos, igual que él traicionó a quienes confiamos en su honestidad y rectitud, inexistentes ambas.
Estoy de acuerdo con este héroe: Uribe tiene huevo.
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